El médico de Familia es «el especialista en personas» y resuelve más del 90 por ciento de las demandas de los usuarios del Sistema Nacional de Salud.
El médico de Familia es el generalmente conocido por la población como médico de cabecera o general, aunque existen diferencias con éste, ya que para ser médico de familia los licenciados en Medicina realizan cuatro años de formación MIR (médico interno residente) en la especialidad de Medicina de Familia y Comunitaria.
Durante este período se forman tanto en el hospital como en el Centro de Salud en las distintas áreas de conocimiento médicas, quirúrgicas y de urgencias y conocimientos en áreas de Salud Pública y Medicina Comunitaria a través de seminarios y trabajos prácticos. La mitad de la formación transcurre en un centro de salud acreditado para ello.
Esta evolución no es producto del azar y obedece a distintas investigaciones sobre los diversos modelos sanitarios de los países, que han puesto de manifiesto que un primer nivel sanitario (o Atención Primaria) bien organizado, con profesionales cualificados en sus filas, repercuten en una mejora de la salud de la población.
Así pues en España, en 1978, un Real Decreto, el 2.015/78, regula por vez primera la especialidad de Medicina de Familia y Comunitaria vía MIR (Médico Interno Residente), a través de la cual se formarán los primeros médicos de familia, los médicos de las personas.
*Publicado por SocalemFYC